En este proyecto de diseño de interiores pedían renovar el salón y los dormitorios para modernizar y adaptarse al crecimiento de los niños. Combinando materiales y colores para lograr una imagen de ligereza, amplitud, naturalidad y diseño donde la funcionalidad y la practicidad se hacen eco del conjunto. El resultado de la reforma fue un espacio equilibrado que invita a disfrutar solo o en compañía. Dormitorios donde se respira la sencillez y ligereza del diseño, y en el que cada rincón esconde un secreto y un cajón escondido. Creando sensación de tranquilidad y paz a través de los colores y materiales elegidos para acompañar al sueño. Una atmosfera fresca y colorida que se transmite a lo largo de toda la vivienda y donde los colores vivos se convierten en protagonistas.